Las diferencias existentes entre las personas son las que nos convierten en fortalezas de distinto territorio. La tuya es la que veo desde mi ventana; la mia la que mantengo en pie gracias a ti. Tus murallas son tu criterio; tu bandera eres tú. 
La naturaleza no permite que abandone mi morada e irrumpa en la tuya porque en ese caso la mía se desmoronaría al verse abandonada... y mi mente y mi corazón quedarían huecos para siempre... porque tú eres tú... y yo soy yo...
Pero existe el viento de la vida que nos ama; ese mismo viento que orienta tu bandera a mi casa y me acaricia la cara. 
Si me preguntas qué es amor... el amor es la energía más poderosa y, sin embargo, mas desconocida del mundo. Es el pasadizo secreto que excavo con mis propias manos, lo que me impulsa a llegar a tus puertas... para que me claves una espada en el costado... y hagas de mi sangre... la ambrosía que te hará inmortal en una vida en la que siempre soplará el viento.